CIUDAD DE MÉXICO, 6 de noviembre, (EDT).— 11 mil científicos de 153 países del mundo advirtieron que es inevitable el “sufrimiento humano”, si no hay cambios radicales para reducir las emisiones de dióxido de carbono y otros factores que contribuyen al cambio climático.
Esta fue la conclusión del artículo, que la coalición mundial de especialistas, dirigida por William J. Ripple y Christopher Wolf, de la Universidad Estatal de Oregón, publican en la revista BioScience.
“Los científicos tienen una obligación moral de advertir a la humanidad acerca de cualquier gran amenaza.Sobre la base de la información que tenemos, es claro que encaramos una emergencia climática”, dijo Thomas Newsome, de la Universidad de Sydney, en Australia.
Los científicos analizaron la información pública que ha sido recolectada a lo largo de 40 años sobre el uso de la energía, las temperaturas en la superficie terrestre, el crecimiento de la población, la extensión de cultivos, la deforestación, la pérdida de hielo polar, los índices de fertilidad, las emisiones de dióxido de carbono y el producto interior bruto de las naciones.
Áreas urgentes que los gobiernos deben atender
Los científicos señalan siete áreas en las que es urgente tomar medidas inmediatas, para frenar los efectos de un planeta en calentamiento.
1) La energía: Es imprescindible implementar prácticas masivas de conservación; reemplazar los combustibles fósiles con energías renovables bajas en carbono; dejar las reservas restantes de combustibles fósiles en el suelo; eliminar los subsidios a las compañías de combustibles fósiles, e imponer tarifas de carbono que son lo suficientemente altas como para restringir el uso de combustibles fósiles.
2) Contaminantes de corta duración: Los científicos exigen que se reduzcan rápidamente las emisiones de metano, hollín, hidrofluorocarbonos y otros contaminantes climáticos de corta duración; hacerlo tiene el potencial de reducir la tendencia al calentamiento a corto plazo en más del 50% en las próximas décadas.
3) La naturaleza: Recomiendan restaurar y proteger ecosistemas como bosques, praderas, turberas, humedales y manglares, y permitir que una mayor parte de estos ecosistemas alcance su potencial ecológico para secuestrar dióxido de carbono atmosférico, un gas de efecto invernadero clave.
4) La comida: Es necesario comer más vegetales y consumir menos productos animales, para reducir significativamente las emisiones de metano y otros gases de efecto invernadero y liberar tierras agrícolas para el cultivo de alimentos humanos, en lugar de alimentos para el ganado.
5) La reducción del desperdicio de alimentos: Es fundamental ya que recuerdan que al menos un tercio de todos los alimentos producidos terminan como basura.
6) La economía: Los especialistas recomiendan reconvertir en una economía de carbono, para abordar la dependencia humana de la biosfera y alejar los objetivos del crecimiento del producto interno bruto y la búsqueda de la riqueza. Así, aconseja frenar la explotación de los ecosistemas, para mantener la sostenibilidad de la biosfera a largo plazo.
7) La población: Es indispensable estabilizar una población humana global, que aumenta en más de 200 mil personas por día, garantizando la justicia social y económica.
No todo está perdido
Pese al rápido aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero, los científicos han observado que algunas buenas prácticas están teniendo resultados satisfactorios.
Por ejemplo, la disminución de los índices de natalidad y la incorporación creciente de fuentes de energía renovables.
Es por esto que los científicos expresaron cierto optimismo al mencionar “un reciente aumento de la atención a este problema”.
“Los organismos gubernamentales formulan declaraciones de emergencia climática”, apuntaron. “Los escolares hacen huelgas. Los tribunales procesan demandas por daño ambiental. Los movimientos ciudadanos demandan cambios, y muchos países, estados y provincias, ciudades y empresas responden”, añadieron.
EDT/TIV