Imagen: Diego Beyró, La sesión
Karen Castillo Castillejos
“Viajé a la casa de mi infancia. Estaba vacía. La recorrí detenidamente, recuerdo los olores y las sensaciones. En el patio me encontré con Dieguito, estaba de espaldas. Lo llamé y se dio vuelta. Más serio que yo. Yo estaba nervioso. Su mirada fue tan penetrante como la mía, pero él tenía menos miedo. Dialogamos con nuestras miradas, compartimos una sonrisa”.
Estas son las palabras del artista plástico Diego Beyró, quién a través de La sesión, nos invita a conocer a su niño interior: Dieguito, un niño serio, que, desde siempre ha tenido un bigote.
El adulto que quiere ser un niño
Diego Beyró, nació en Buenos Aires, Argentina en 1984. Estudió dirección de arte en la Escuela Superior de Creativos Publicitarios en Buenos Aires. Residió en Italia durante dos años, tras haber obtenido la beca Fabrica, del laboratorio artístico de Benetton.
Desde hace cuatro años vive en México, espacio que considera clave para su exploración creativa, ya que, en él, tiene la oportunidad de intercambiar inquietudes y temores con artistas de su mismo género.
Su obra, se ha caracterizado por hablar sin inhibiciones sobre el erotismo y el cuerpo, “materia de estudio minuciosa, que sirve como punto de partida, para plasmar sensaciones y registrar su intimidad”, dice a través de su sitio oficial.
Diego Beyró es un artista que cree en la exploración y el descubrimiento; así como en el constante hacer, el que considera determinante para su obra y para la expresión del arte contemporáneo. “La tarea del artista es hacer arte para expresarse”, comenta en entrevista para Almomento.mx.
A través del arte, busca abrir posibilidades y caminos que conecten con el espectador y con sus propias experiencias. Por lo que, en esta ocasión, nos invita a conocer a nuestro niño interior; preguntándose: ¿acaso el arte puede ser un proceso terapéutico?
De la terapia, al encuentro
¿Alguna vez has considerado salir al encuentro con tu niño interior?, tan solo para identificar sus carencias, saber que pensaba, o para fortalecer los lazos que tiene con el adulto. Diego Beyró lo pensó, y lo hizo real a través de una serie de imágenes, con las que construye nuevos recuerdos consigo mismo.
La sesión, es una exposición compuesta por tres momentos, a través de los cuales, conectaremos con el niño del pasado que viene al encuentro con el adulto del presente, para recordarle, que siempre ha estado en él.
El primer momento, es un acto infantil, el juego de un niño que dibuja a mano, bigotes a las fotografías del pasado. El segundo, está compuesto por documentos intervenidos digitalmente, expresión del adulto experto.
El tercer momento, es el de la hipnosis, un instante real, en el que, conducido por un terapeuta, Diego se convirtió en espectador y parte de sí mismo.
La sesión, comenzó desde hace mucho tiempo atrás, en la búsqueda del balance entre el niño que tiene menos juicios, que suele ser más divertido y temer menos a los riesgos, con el adulto, que es más racional, controlador y tiene mayor miedo al fracaso.
A través de esta pieza, el artista que asegura siempre ha tenido un bigote, como “símbolo de su adultez”; crea una nueva herramienta de provocación, que representa la exploración, la necesidad expresiva, el enfoque y concentración, para introducirse de manera más profunda en la escena del arte contemporáneo.
La sesión es totalmente inacabada…
La invitación
La segunda exposición individual de Diego Beyró en México, tiene lugar en Diorama Espacio de arte Independiente, en Anahuac 83, Roma Sur.
La inauguración se llevará a cabo, este viernes 15 de junio a las 19:00 hrs, la entrada es libre y gratuita. Si no puedes venir, no te preocupes, podrás visitar La sesión, del 16 de junio al 1 de julio.
Si quieres conocer al pequeño Dieguito al encuentro con Diego, te invitamos a que no te pierdas esta exposición.
Asimismo, no dejes de seguir a Diego Beyró, a través de su sitio oficial y sus redes sociales, como Facebook e Instragram, donde podrás conocer más a fondo el trabajo de este artista.
EDT/kcc