CIUDAD DE MÉXICO.- Luego de una intensa investigación llegada a cabo por la Universidad de Sevilla y el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, un grupo de arqueólogos ha encontrado los restos de lo que probablemente sea el templo de Hércules Gaditano (Heracles Melqart). La estructura del legendario edificio se halla sumergida cerca de la desembocadura del Caño de Sancti Petri, en Cádiz.
De acuerdo a la revista National Geographic, las ruinas tienen un largo de 150 metros y un ancho de 300, más los amarraderos. Al sur de los restos, se localizaron numerosas cimentaciones, así como un puerto interior, algunos espigones y un aŕea de hábitat.
Para corroborar el carácter y cualidades de estos vestigios, el sitio se someterá a diversas prospecciones geofísicas, tanto terrestres como acuaticas. Igualmente, se realizarán estudios documentales y geoarqueológicos, además de un muestreo peloambiental que confirme la información que, a través de autores como Estrabón, Silio Itálico y Filostrato, se conoce hoy en día.
Los resultados de la investigación se presentaron en el Centro de Aqueología Subacuática del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico. Mila Alzaga, su directora, destacó el mérito de trabajar en un contexto con complicado como lo es la desembocadura del Caño de Sancti Petri. De acuerdo a su descripción, sólo se puede trabajar tres horas diarias en dicho espacio subacuático, pues éste tiene poca visibilidad y mucha corriente, de modo que sólo podemos bucear cuando empieza a entrar agua limpia en el caño, explicó.
Una zona con prometedora
Cabe mencionar que las exploraciones en el área han arrojado otros descubrimientos, por ejemplo, un entramado urbano en la zona del río Arillo. Este asentamiento posee mayores dimensiones que Baelo Claudia, conjunto arqueológico romano localizado a 22 kilómetros de Tarifa. Este hallazgo, como el del templo de Melqart, contribuirá a reconstruir el pasado del sur de España, luego de años y años de trabajo, según precisó Alzaga.
El descubrimiento de las estructuras se realizó a través de un Sistema de Información Geográfica y la aplicación del método LiDAR. Los encargados de su empleo fueron Ricardo Belizón Aragón y Antonio Sáez Romero, del Departamento de Prehistoria y Arqueología de la Universidad de Sevilla. Los trabajos de investigación se realizaron en el marco del Proyecto Ergasteria, dirigido por Eduardo Ferrer y el mismo Sáez, profesores de la citada universidad.
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Con información de National Geographic en español
ET/SRH