CDMX.- Con el propósito de generar un diálogo en torno a la represión y violaciones a derechos humanos por parte del Estado, este viernes 9 de septiembre concluyó el Foro “Tlaxcoaque: historia, verdad y justicia”, organizado de forma semanal en cuatro jornadas por el Gobierno de la Ciudad de México y la Secretaría de Cultura local, en la Casa Refugio Citlaltépetl, con el cual se abre el camino hacia la apertura del Sitio de Memoria Tlaxcoaque.
Durante la última jornada, dedicada al tema de Políticas públicas de memoria, se contó con las participaciones virtuales de Verónica Torras, directora de Memoria Abierta (Argentina), y Patricia Ogaldes, de la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala, así como la intervención presencial de José Reveles, de la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia.
“No olvido es memoria y memoria es la búsqueda de la verdad”, externó el también periodista y escritor José Reveles, quien abordó el uso del Campo Militar número uno en el atropello de los derechos humanos en diversos momentos históricos.
Asimismo, durante su participación, resaltó que la violencia ejercida por el Estado en la realidad mexicana es difícil de identificar por no tener antecedentes de dictaduras militares, cuyas prácticas mantienen grandes similitudes de operación en el país.
Moderada por el historiador Juan Gerardo López, la última mesa resaltó en voz de Torras la tergiversación de la información, el silencio de los actores estatales, la impunidad y clandestinidad del Estado, así como la importancia de encontrar la justicia a través de la búsqueda de la verdad con respaldo institucional a través de la creación de nuevos organismos y entes institucionales.
“Las víctimas luchan por que haya justicia y acceso a la verdad a través de los tribunales, nosotros, mediante la creación del Centro de la Memoria hemos resguardado 5 mil 400 testimonios que esperamos puedan aportar a encontrar la verdad”, externó Ogaldes.
A lo largo de las cuatro jornadas se ha llevado a cabo el análisis y reflexión sobre las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la guerra sucia en diversos puntos, entre ellos, los separos del sótano del edificio de la antigua Dirección General de Policía Tránsito del extinto Distrito Federal, que ahora por iniciativa del Gobierno capitalino se convertirá en el sitio de memoria a través del Proyecto Tlaxcoaque.
La primera jornada del 18 de agosto, la cual fue inaugurada por la secretaria de Cultura capitalina, Claudia Curiel de Icaza, estuvo enfocada al recuento de las vejaciones y la impunidad solapada por el Estado en torno a las torturas realizadas en Tlaxcoaque, relatadas por activistas e investigadores del tema como Beatriz Torres, Camilo Vicente Ovalle y Fritz Glockner.
La segunda dio voz a Ismael Colmenares y Ana Ignacia Rodríguez “La Nacha”, activistas que fueron aprehendidos injustamente por su disidencia política, por ser parte del Movimiento estudiantil de 1968, y que fueron víctimas de tortura en los separos de Tlaxcoaque.
La tercera jornada tuvo la participación de la fiscal de la Ciudad de México, Ernestina Godoy, y Adrián Arroyo Legaspi, representante de Morena en el Congreso capitalino, quienes abordaron los trabajos que las instituciones de procuración de justicia y legislativas están realizando para lograr reparar el daño a víctimas de violaciones de derechos humanos en Tlaxcoaque.
El Foro fue concebido como parte del proyecto con el que la Secretaría de Cultura local abre el camino hacia la apertura del Sitio de Memoria Tlaxcoaque, que será un espacio para dar fe de las vejaciones cometidas en la antigua Dirección General de Policía de Tránsito del extinto Distrito Federal y que también servirá para reabrir los casos de tortura con la finalidad de lograr justicia para las víctimas y sus familiares.
AM.MX/CV