CIUDAD DE MÉXICO.- Los emprendedores se enfrentan día a día a diferentes situaciones que hacen que la administración de su proyecto esté llena de retos para salir adelante; sin embargo, cuando el emprendedor tiene una discapacidad, las barreras y dificultades se multiplican y hacen que el camino sea más difícil.
De acuerdo con El Economista, el informe de Discapacidad y Emprendimiento elaborado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), concluyó que las personas con discapacidad son más propensas a emprender que las personas sin discapacidad. A menudo las personas en esta condición se acercan al emprendimiento debido a la dificultad para encontrar empleo, además de la constante discriminación que existe.
Sin embargo, en México se hacen más evidentes las barreras en los emprendedores con discapacidad debido a que en la Radiografía del Emprendimiento en México 2023 elaborada por la Asociación Mexicana de Emprendedores (Asem), señaló que el sólo el 5.8% de los emprendimientos son fundados por personas que se reconocen con discapacidad y neurodivergentes.
Además, el 65.8% de la población de 12 años y más con discapacidad piensa que las personas con diferentes condiciones son rechazadas por la mayoría de la gente, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Discriminación.
A pesar del panorama, las personas con discapacidad tienen una actitud emprendedora sólida, en la que han demostrado la sensibilidad para crear servicios y productos inclusivos que se adaptan al mercado y con el potencial de crecer, siendo un eje de innovación para el ecosistema.
“El emprendimiento, con su énfasis en la creatividad y la adaptabilidad, se presenta como un terreno fértil para que las personas con discapacidad destaquen. Tecnologías accesibles, enfoques innovadores y modelos de negocio inclusivos son solo algunas de las maneras en que emprendedores con discapacidades están desafiando las expectativas”, comentó Mario Romero, director de Impact Hub.
Así mismo, el estudio Emprender con Discapacidad de Impact Hub, destacó que el 53% de las personas encuestadas ya fundaron un negocio, mientras que el 47% no cuenta con un emprendimiento; sin embargo, el 95% que no tienen una empresa estarían interesados en crear un proyecto propio.
Ecosistema Inclusivo
En términos generales, en nuestro país hay serias dificultades al momento de emprender, de hecho, la Asem señala que los emprendedores le dan a México una calificación reprobatoria, de 2.6 sobre cinco, respecto a las condiciones que se tienen para abrir un negocio, principalmente por las barreras al momento de constituir una empresa, la falta de apoyo económico, entre otros factores, lamentablemente estas circunstancias se vuelven aún más complejas, cuando se habla de emprendedores que tienen alguna discapacidad.
En tanto, Romero comentó que el ecosistema emprendedor no sólo debe mejorar sus condiciones, sino volverse más inclusivo para poder brindar una oportunidad a las personas con discapacidad que buscan abrir un negocio.
“Con este estudio queremos dar luz no solo a los desafíos que enfrentan las personas con discapacidad para emprender en México, sino también a la gran oportunidad que existe para crear un ecosistema emprendedor inclusivo, del cual las personas con discapacidad puedan ser parte al desarrollar programas especializados y adaptados para ser más accesibles, además de redes de apoyo, mentoría y financiamiento enfocado en dicha población”, mencionó el directivo.
Principales barreras
En el análisis realizado por Impact Hub, se destacaron tres principales barreras a las cuales se enfrentan las personas con discapacidad.
El primero son los prejuicios y desconfianza que impiden valorar sus capacidades, ya que en muchas ocasiones se enfrentan a la desconfianza de potenciales clientes, jefes e incluso de algunos de sus familiares que pusieron en duda su capacidad para materializar o hacer crecer su emprendimiento.
La segunda es la tensión entre gestionar el negocio y procurarse por su bienestar, debido a que de acuerdo al grado de su discapacidad, requieren mayor dedicación en su rehabilitación y terapias, lo cual consume tiempo esencial para administrar y crecer el negocio. El no desatender alguno de los dos frentes, representa un desafío continuo que hay que sortear.
Y el tercero es la escasez de recursos y herramientas adaptados a sus necesidades. Hoy en día es clave para los negocios tener herramientas de promoción, gestión y crecimiento de la empresa; sin embargo, la gran mayoría de los desarrollos tecnológicos no resultan accesibles para personas con discapacidad.
AM.MX/fm