CIUDAD DE MÉXICO.- Además del frío, la llegada del invierno trae consigo un aumento significativo en las enfermedades respiratorias. Con aproximadamente 26 millones de infecciones respiratorias agudas registradas en México durante 20221, sumado al reciente aviso emitido por el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica debido al incremento de virus respiratorios, incluyendo influenza, COVID-19 y el virus sincitial respiratorio (VSR),el invierno presenta desafíos significativos.
Las infecciones respiratorias son causadas por virus, bacterias o parásitos que se transmiten fácilmente de persona a persona a través de gotas de saliva, contacto con superficies contaminadas o inhalación de partículas en el aire.
La Dra. Ana Gabriela Herrera, experta en alergología, señala que “debido a las bajas temperaturas los lugares comunes como el hogar, escuelas y oficinas suelen mantenerse cerrados evitando la ventilación, lo que crea un ambiente propicio para la proliferación de bacterias y virus en el aire que aumentan el riesgo de enfermedades respiratorias, especialmente en niños, adultos mayores y aquellos con enfermedades crónicas.”
La calefacción en interiores también puede contribuir al problema, ya que además de congregar personas lo que facilita la propagación de virus entre individuos, puede generar ambientes secos que irritan las vías respiratorias, haciendo que las personas sean más susceptibles a las infecciones.
“Con el frío, los cilios que recubren el aparato respiratorio, defensas naturales en la nariz, pierden movilidad, facilitando la penetración de microorganismos en el cuerpo, por lo que se recomienda usar Stérimar, una solución de agua de mar 100% natural que ayudará a mantener la hidratación nasal disminuyendo el paso de virus y bacterias”, añadió la Dra. Herrera.
Si bien cualquiera está expuesto a contraer enfermedades respiratorias, es importante tomar algunas medidas para prevenirlas como:
Vacúnate, seas o no parte de los grupos de mayor riesgo, la vacunación es clave al momento de prevenir enfermedades como la influenza.
Lava tus manos regularmente con agua y jabón o utiliza alcohol en gel para detener la propagación de virus y bacterias.
Cubre nariz y boca al toser o estornudar, ya sea con un pañuelo o con la parte interna del antebrazo. Además de protegerte a ti, estás cuidando a quienes te rodean.
Ventila tus espacios regularmente. La circulación de aire fresco y la entrada de luz solar son aliados poderosos. Mantener los lugares cerrados bien ventilados reduce la concentración de partículas en el aire.
Mantén hidratado tu cuerpo a través de la ingesta de agua a una temperatura óptima.
Una alimentación balanceada es clave para fortalecer tu sistema inmunológico. Incluye frutas y verduras ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes.
Mantén tus fosas nasales hidratadas con Stérimar, lo que ayudará a disminuir la entrada de virus y bacterias.
Adáptate a los cambios de temperatura. Cubrir boca y nariz al salir a ambientes fríos es clave.
Evita lugares con humo, ya sea al quemar leña en los hogares, o bien, estar en contacto con fumadores.
Conoce tu cuerpo y presta atención a cualquier síntoma. En caso de malestar, evita la automedicación y busca asesoría médica.
Aunque es inevitable evitar por completo el contagio de infecciones respiratorias, seguir estas recomendaciones contribuirá a disminuir la probabilidad de contraerlas. Asimismo, es crucial estar alerta a cualquier síntoma y consultar a un médico para obtener un diagnóstico rápido y recibir el tratamiento adecuado.
“Las enfermedades respiratorias agudas pueden afectar la parte alta: nariz, oídos, garganta y faringe o la parte baja de las vías respiratorias como los pulmones, por lo que, es importante intentar prevenirlos o bien mantener cuidado a los síntomas y avances de la enfermedad ya que pueden llegar a convertirse en enfermedades graves como bronquitis o neumonía”, finalizó la Dra. Herrera.
AM.MX/fm