LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- El consentimiento está en el centro de How to Have Sex. Molly Manning Walker se aventura a explicarlo y desenmarañarlo, hablando de tú a tú con su generación y con los más jóvenes que estén ahora en ese preciso momento en el que la virginidad es una carga.
De acuerdo con CINEMANÍA, tres adolescentes británicas se van de vacaciones a lugares con mucha fiesta, alcohol y sexo. Debería ser el mejor verano de sus vidas, pero deberán aprender lo que de verdad significa el consentimiento.
Tal y como está planteada hoy la sociedad, esa hipersexualización en la que el deseo femenino, el sexo feliz y positivo para la mujer no parece estar planteado.
Manning Walker tira de su propia experiencia y la de otras mujeres para trasladar a la pantalla un retrato hiperrealista (Andrea Arnold y su American Honey están entre sus claros referentes) de esta juventud que no cuenta con instrumentos ni conocimientos para entender de verdad el consentimiento, para defenderse o saber moverse en estas fiestas alcoholizadas.
Tara (la brillante novel Mia McKenna-Bruce) es la protagonista: su rostro, su felicidad, su excitación, su angustia, su desconcierto.
La cámara la sigue de cerca, pero con absoluto respeto y con la intención de meternos de lleno en sus fiestas y sus cabezas. El ambiente es festivo, neón, ruidoso, y quizá por eso también es abrumador, complejo. Hace falta mirarlo así de cerca.
AM.MX/fm