MADRID, ESPAÑA / SemMéxico.- El deporte de competición se apoya en el público femenino para continuar ampliando su notoriedad mediática. Ante la pérdida de audiencias y la caída de la asistencia en la mayoría de los espectáculos deportivos en directo, las principales competiciones buscan fórmulas para cambiar o adaptar su propuesta de valor. El objetivo es aumentar el ticket medio, pero también alcanzar públicos complementarios a los de siempre. En este marco, el público femenino se convierte en un target fundamental tras décadas en las que los productos deportivos mayoritarios iban dirigidos a un público eminentemente masculino.
El margen de crecimiento del deporte de élite entre el público femenino es más que notorio. De hecho, alrededor de 5 millones de mujeres acudieron a espectáculos deportivos en directo en 2022, según la última edición de la Encuesta de Hábitos Deportivos, realizada por el Ministerio de Cultura y Deporte. Es decir, cerca de 16 millones de mujeres todavía se mantienen alejadas del deporte como evento de ocio al que acudir de público, lo que supone más del 76% de la población mayor de 15 años.
Las cifras aún están lejos de las del público masculino. El porcentaje de espectadoras que presenció eventos deportivos es más de 16 puntos porcentuales menor que el de aficionados hombres. En concreto, cuatro de cada diez hombres reconocen haber visto alguna competición deportiva en directo a lo largo del año, un ratio que en las mujeres retrocede a dos de cada diez personas.
El fútbol se consolida como la opción preferida entre el público femenino. En 2022, las mujeres redujeron hasta en tres puntos porcentuales su brecha con el público masculino. El 13,2% de ellas vio un partido de fútbol en las gradas, por un 4,5% que acudió a una cancha de baloncesto. Asimismo, el deporte femenino triunfa más entre las mujeres que los hombres. De hecho, entre las personas que acudieron a algún evento deportivo en directo, el 33% de las mujeres presenció modalidades en su categoría femenina, mientras que en el caso de los hombres sólo lo hizo el 18,3%.
Fútbol y tenis por TV: el perfil de la audiencia
Los hábitos de consumo varían en función de si se trata de asistir a un partido de forma presencial o verlo por televisión u otras plataformas. En este caso, la cifra de mujeres interesadas en eventos deportivos casi se triplica, hasta más de 13,3 millones. Se trata de un 62,6% de la población analizada, pero se mantiene veinte puntos porcentuales por debajo de la audiencia masculina.
El fútbol y el tenis son, con diferencia, los deportes más consumidos, ya sea por televisión, radio o internet. Ahora bien, el seguimiento del fútbol entre la audiencia femenina no alcanza a la mitad de este segmento de la población, mientras que casi tres de cada cuatro hombres ven partidos de fútbol. En el deporte de la raqueta, en cambio, la brecha es muy inferior entre hombres y mujeres. El 36,6% de las mujeres sigue el tenis por medios audiovisuales, por un 49,9% de los hombres. Además, se trata de la única disciplina que ha crecido en audiencia en comparación con 2015.
Asimismo, el deporte masculino continúa siendo el rey también entre las consumidoras. Seis de cada diez mujeres consumen competiciones masculinas, mientras que sólo el 23,4% consume deporte femenino. En el fútbol, por cada cuatro mujeres que consume fútbol masculino, sólo una sigue el fútbol femenino.
De hecho, el aumento de interés del público general por el fútbol femenino se evidenció en 2023, cuando dos emisiones se colocaron entre las cinco más vistas de la televisión española. La celebración del Mundial femenino se situó en el tercer lugar de emisiones deportivas más seguidas tras congregar a 6,2 millones de personas frente a la pantalla. La emisión de la final contra Inglaterra, por su parte, se quedó en el quinto lugar, con 5,5 millones de espectadores.
Más allá de las audiencias excepcionales que pueden llevar aparejadas las victorias en eventos deportivos del calibre de la final de una Copa del Mundo, el fútbol es con diferencia el más seguido en el deporte femenino. De hecho, el 14,4% de la población consumió partidos de fútbol femenino en 2022. Su liderazgo se ha cimentado en las últimas temporadas, puesto que en sólo dos años se ha casi duplicado el porcentaje de la población que consume fútbol femenino, al calor de la profesionalización de la Liga F, así como los triunfos del Barça en Europa y de la selección española en el ámbito internacional.
Entre los diferentes canales de audiencia, la televisión mantiene su hegemonía como medio preferente para el consumo por parte de las mujeres de la mayoría de los espectáculos deportivos, muy por encima de la radio u de otras plataformas u OTTs. De hecho, menos del 9% de las mujeres sigue las competiciones por internet, casi tres veces menos que en el caso de los hombres.
La natación, hacia la equidad
Si bien el consumo de espectáculos deportivos sigue estando encabezado por una audiencia masculina, en algunos deportes la brecha entre el número de consumidores y consumidoras es cada vez más pequeña. Se trata de deportes con modalidades mixtas o cuyas competiciones masculinas y femeninas se celebran de forma conjunta. De este modo, como el interés por ambas categorías es similar, es más sencillo atraer por igual tanto al público masculino como femenino, eliminando así muchas de las barreras para el consumo femenino del deporte.
La natación es la que mejor representa esta tendencia, puesto que la diferencia entre el porcentaje de hombres y de mujeres que consume sus competiciones por medios audiovisuales es de alrededor de dos puntos porcentuales. Esta disciplina olímpica es la única en la que más mujeres consumen la categoría femenina que la masculina. En cambio, en el resto de las disciplinas la brecha por género oscila entre los diez puntos porcentuales del atletismo o el balonmano y los 26 puntos porcentuales del fútbol.
AM.MX/fm