Para establecer las diferencias entre un término y otro, hay que partir de la siguiente base: algo biodegradable es algo que se descompone. Por lo tanto, se deshace en contacto con el medio ambiente.
La diferencia entre ambos términos radica en el tiempo y condiciones de degradación:
Los polímeros biodegradables son degradados por la acción de microorganismos tales como bacterias, hongos y algas.
Los polímeros compostables, igualmente se degradan por la acción de microorganismos pero a una velocidad igual a la de materiales tales como hojas, papel y trozos de madera.
Estos plásticos no deben dejar fragmentos que duren más de 12 semanas en el residuo. Tampoco deben contener metales pesados o toxinas y deben permitir el crecimiento de plantas.