CIUDAD DE MÉXICO.- Desde noviembre de 2018 hasta mayo de 2025, la deuda pública en México aumentó 7 billones 192 mil 948 millones de pesos, de acuerdo con cifras oficiales de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Este incremento se registró desde el inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, quien asumió la Presidencia con un saldo histórico de los requerimientos financieros del sector público de 10 billones 480 mil millones de pesos. Hoy, esa cifra alcanza los 17 billones 673 mil millones.
En términos simples, si se dividiera esta deuda entre todos los mexicanos, cada ciudadano debería aproximadamente 131 mil pesos, según estimaciones del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Este crecimiento representa el 77% del Presupuesto de Egresos aprobado para 2025, que asciende a 9 billones 302 mil millones de pesos. También equivale a 14 veces el costo estimado del Tren Maya, una de las obras emblemáticas de esta administración.
Aumento sin crisis, pero con alto costo
A diferencia de crisis anteriores que impulsaron el endeudamiento nacional —como la crisis financiera de 2008 o la pandemia de COVID-19— el año con mayor contratación de deuda fue 2024, en pleno proceso electoral y sin una emergencia económica visible. Esto ha generado cuestionamientos entre analistas.
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Ricardo Cantú, especialista del CIEP, destacó que los gobiernos han gastado de forma sistemática por encima de su capacidad de recaudación. Subrayó que esta situación traslada las obligaciones fiscales a futuras generaciones. Además, advirtió que se han evitado reformas fiscales que permitan fortalecer los ingresos públicos de forma sostenible.
Por su parte, Oscar Ocampo, del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), explicó que el último año de gobierno implicó un aumento importante de deuda, con el objetivo de concluir obras como Dos Bocas, el Tren Maya, el AIFA y el Corredor Transístmico. “Después de la fiesta viene la resaca”, dijo.
Gasto financiero también se dispara
El costo financiero —es decir, lo que se paga por intereses y servicios de deuda— también muestra un aumento significativo. En mayo de 2025, México destinó 463 mil 445 millones de pesos a este rubro, frente a los 409 mil 424 millones del mismo mes del año anterior. Es un aumento de 13.1%.
Cantú enfatizó que este gasto es ineludible y reduce los recursos disponibles para sectores esenciales como salud, educación, seguridad y programas sociales. “Es una bola de nieve. Endeudarse para pagar deuda no es sostenible”, advirtió.
Aunque la deuda aún se mantiene por debajo del 50% del PIB, el reto futuro será evitar salir de ese margen y generar ingresos que respalden el gasto, sin comprometer el bienestar de las próximas generaciones.
AM.MX/fm