CIUDAD DE MÉXICO, 30 de julio, (EDT).- ¿Qué opinan ustedes de ver trabajar juntos a un trío formado por Guillermo Del Toro, Alfonso Cuarón y Lydia Cacho? Se escucha como una bomba, ¿no? Pues resulta que esta bomba está a punto de estallar, porque los dos cineastas mexicanos dueños de nuestros corazones cinéfilos, andan con ganas y, desde hace ya varios años, de llevar a la pantalla grande el best seller de Lydia Cacho: “Los demonios del edén”.
Durante una entrevista con Vanity Fair, la periodista y activista comentó que desde hace ya bastante tiempo tiene una gran amistad con los dos ganadores del Óscar y que la idea de hacer un largometraje basado en este libro publicado en 2005, que reveló una red de pederastia y pornografía infantil en la que estaban involucrados grandes empresarios y políticos como Jean Succar Kuri, el ex gobernador de Puebla; Mario Marín, Emilio Gamboa y Miguel Ángel Yunes, surgió desde hace muchos años, pero no habían encontrado el momento de concretar.
Pero como no hay plazo que no se cumpla, los tres amigos concretaron el proyecto en la pasada edición del Festival Internacional de Cine de Morelia. “Estábamos desayunando Bertha, Guillermo y yo, y él me dijo:Ahora sí ya, llevamos años preparando esto, ahora sí tiene que salir”, relató la periodista.
Cacho señaló que otra razón del retraso de la puesta en marcha del proyecto fue que la aproximación al tema complicó la elección de un director y de la actriz que interpretará a Lydia (y respecto a la actriz siguen sin decidirse). La directora elegida fue Patricia Riggen, cuyos más conocidos trabajos son: “Bajo la misma luna” y “Los 33”, el drama que contó la historia de los mineros que permanecieron atrapados en una mina en Chile durante dos meses. En el proyecto también se involucrará la reconocida productora Bertha Navarro.
Relatar la historia de una investigación que para ella representó una época en la que sufrió acoso y tortura por parte de las autoridades mexicanas, por contar la verdad y denunciar un delito, en un contexto en el que México se ha convertido en el país más peligroso para ejercer el periodismo, significa la oportunidad de hacer de esta película un verdadero detonador social. “No es una cinta que va a dejar a la gente que salga arrastrándose y diga ‘esto ya se fregó’. Cuando la gente entre a verla verá todo lo que sucedió y cuando salga, saldrá movilizado.”
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