Ciudad de México.- En los últimos días, un importante diario nacional anunció nuevas incorporaciones a su sección de columnas de opinión. Sin embargo, varias de las nuevas voces han sido objeto de una intensa ola de comentarios violentos en redes sociales. El Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED) y su Asamblea Consultiva han expresado su profunda preocupación por el uso de las plataformas digitales como vehículos para la difusión de discursos discriminatorios y de odio, que están afectando gravemente la convivencia y el bienestar de las personas.
El COPRED ha señalado que las redes sociales, aunque deberían ser espacios para la libre expresión democrática, se están convirtiendo en arenas de violencia digital. Esta situación no solo amenaza la integridad de las personas afectadas, sino que también socava los principios fundamentales de una sociedad democrática basada en la dignidad, libertad y respeto a los derechos humanos.
El Consejo ha reiterado en múltiples ocasiones la importancia de no contribuir a la exclusión, discriminación y violencia. “La libertad de expresión en un Estado democrático descansa sobre los valores de este: la dignidad, libertad y el respeto absoluto a los derechos humanos de todas las personas sustentado sobre el principio de universalidad”, afirmó el COPRED. Según la institución, los discursos discriminatorios y de odio no tienen cabida en una sociedad democrática, ya que atentan contra los valores que la sustentan.
Los discursos discriminatorios y de odio se caracterizan por desvalorizar, agredir, o excluir a personas basándose en prejuicios o estereotipos, provocando graves consecuencias que pueden limitar el acceso a derechos y servicios. Esta forma de violencia digital puede normalizar y justificar acciones que causan daño o sufrimiento a las personas.
A pesar de la potencialidad de las redes sociales para fomentar el discurso democrático, estas también pueden ser mal utilizadas para difundir mensajes que atentan contra los principios democráticos. El COPRED destaca que, aunque la libertad de expresión es un valor fundamental, no debe ser utilizada como pretexto para socavar los pilares democráticos. La violencia digital tiene efectos tangibles y reales en las vidas de las personas, y no debe ser tolerada ni normalizada.
Finalmente, el COPRED hace un llamado a la sociedad para evitar la reproducción de discursos discriminatorios y de odio, subrayando que estos no están protegidos por la libertad de expresión y que atentan contra los fundamentos de una sociedad democrática y plural, basada en el respeto y el trato igualitario.
EDT.MX/CV