Ciudad de México.- La modelo e influencer Verónica Melendes Coronado, conocida como Luna Bella, ha generado una ola de controversia en redes sociales tras grabar un video explícito en las instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro de la Ciudad de México. El hecho, que podría acarrear sanciones, ha levantado una intensa discusión sobre el uso inapropiado del transporte público.
El incidente tuvo lugar en la estación Instituto del Petróleo de la Línea 6 del Metro, una de las más transitadas por los más de tres millones de usuarios que utilizan este sistema diariamente. El video muestra a Luna Bella en escenas explícitas junto a dos hombres vestidos de policías, filmado durante la noche cuando los vagones suelen estar vacíos. Las imágenes se viralizaron rápidamente, obligando al STC Metro a emitir un comunicado.
El comunicado del Metro CDMX fue claro: “El Metro respeta la libertad de expresión, sin embargo reprueba de forma tajante que se utilicen las instalaciones para generar popularidad en cuentas de particulares”. Esta declaración, aunque contundente, fue criticada por muchos usuarios de redes sociales que esperaban una respuesta más severa.
La situación ha generado un debate sobre la seguridad y el uso de espacios públicos en la Ciudad de México. El Metro CDMX informó que reforzará la vigilancia nocturna y los rondines en trenes para prevenir incidentes similares en el futuro. Además, subrayó que “las personas que aparecen en las imágenes publicadas en los últimos días no son usuarios, sino actores y extras que de forma consensuada participan en la grabación”.
Este no es el primer escándalo protagonizado por Luna Bella en el transporte público. En 2012, la influencer ya había generado controversia al grabar una escena similar en el Metro de Monterrey. En esta ocasión, el uso del Metro CDMX para un video explícito ha reavivado el debate sobre los límites de la libertad de expresión y la necesidad de mantener el orden y la seguridad en uno de los sistemas de transporte más grandes del mundo.
La administración actual del Metro CDMX ha destacado una disminución del 78% en la incidencia delictiva, y exhorta a los usuarios a denunciar cualquier situación anómala durante sus traslados. El caso de Luna Bella sirve como recordatorio de la importancia de mantener el respeto y el buen uso de las instalaciones públicas, y plantea interrogantes sobre cómo equilibrar la libertad individual con el bienestar colectivo.
EDT.MX/CV
