Un nuevo año recién comienza y entre los muchos propósitos o metas que algunas personas se plantean está el ser más productivos. Sin embargo, cuando buscamos en internet algunos trucos para lograr ser más productivos nos quedamos enfrascados en la idea de que productividad es igual a mantenernos ocupados todos el tiempo, y esto no es así.
La productividad va más allá de tachar tareas en una lista de pendientes, pues tiene que ver con trabajar de una forma más inteligente y no de trabajar más. Tomando en cuenta esto, se podría definir como la capacidad de concentrarse en lograr objetivos en el menor tiempo posible y con el menor esfuerzo.
Visto de esta forma, ser productivo no es estar siempre ocupado. El secreto de la productividad va de la mano con el cumplimiento de objetivos, personales y profesionales, a corto, mediano y largo plazo.
Ser productivo depende de muchos factores, desde el entorno de trabajo hasta los hábitos de descanso, y no solo de organizar nuestro tiempo. Justo por esto resulta importante incorporar nuevos hábitos a nuestro estilo de vida que nos ayuden a crear un esquema para sacarle mayor provecho a nuestro tiempo.
Con eso en mente, hemos reunido algunos hacks simples de productividad que podemos aplicar a casi cualquier área de nuestra vida. Un paso a la vez podremos alcanzar nuestras metas.
1. Establece un horario
El primer paso para ser productivo es saber qué estás haciendo, cuándo lo estás haciendo y cuánto tiempo vas a estar haciéndolo. Aquí es donde un horario puede ayudar. Recuerda los calendarios no son solo para reuniones. Dedica tiempo a las reuniones, al trabajo e incluso a los descansos. Apégate a eso.
2. Ponte cómodo
Tanto la vida como el trabajo necesitan sentirse bien. Entonces, ¿por qué solo pensamos en la comodidad cuando es hora de relajarse? El confort físico es una piedra angular de la productividad. Sigue siempre algunas reglas básicas: asegúrate de que tu silla brinde el apoyo adecuado, mantén la parte superior de la pantalla a la altura de los ojos y evita la fatiga visual con descansos regulares.
3. Planifica con anticipación
Una de las mejores maneras de tener un día productivo es planificarlo la noche anterior. Por ejemplo, ¿irás al gimnasio a las 7 a. m.? Ten preparada tu ropa de entrenamiento y tu mochila con todo lo necesario para ir a entrenar. También puedes escribir tus objetivos o cosas que debes hacer antes de ir a dormir. De esa manera, te sentirás mentalmente preparado para empezar por la mañana.
4. Encuentra tu por qué
Si regularmente te sientes abrumado por las tareas y responsabilidades, lo más probable es que no sepas tu “por qué”. Tómate un momento para pensar en tu lista de tareas pendientes y profundiza en la importancia de cada uno de ellos. Lo más probable es que encuentres la motivación para comenzar o decidas modificar tu plan.
5. Mantente hidratado
Todos los deportistas saben que el agua es esencial para el máximo rendimiento físico, pero saciar la sed también es crucial para las capacidades cognitivas. Un estudio de la Universidad de East London descubrió que una buena dosis de H20 puede resultar en un aumento del 14 % en la productividad, potenciando todo, desde los niveles de concentración hasta el tiempo de reacción e incluso la memoria.
6. Evita el multitasking
Sobre el papel, la multitarea suena como el truco de productividad más eficaz, pero la verdad es que a menudo hace más daño que bien. Cada vez que obligas a tu cerebro a alternar entre tareas, pagas un precio que es la eficiencia y es más probable que experimentes sentimientos de estrés y agotamiento.
7. Trabaja en ráfagas cortas
Estamos muy lejos del famoso pez dorado mal enfocado, pero la mente humana solo puede concentrarse por un tiempo limitado. Por eso tiene sentido trabajar en ráfagas cortas, con períodos regulares reservados para recargar. Uno de los métodos más populares es la Técnica Pomodoro, que implica trabajar durante 25 minutos seguidos de un descanso de cinco minutos.
8. Tacha tus tareas pendientes de manera “análoga”
Si tiene dificultades para realizar un seguimiento de las tareas y documentos digitales sin perder horas con los videos de virales de TikTok, bloquea tu tiempo cuando no estás en línea y se vuelve “analógico”. Pon tu teléfono en modo ‘no molestar’ y cierra la laptop. Además de ser un cambio de ritmo refrescante, ¿hay algo más satisfactorio que tachar físicamente algo de tu lista de tareas pendientes?
9. Tómate un tiempo para tu cuidado personal
El cuidado personal no es solo una recompensa por un trabajo bien hecho. Según el psicólogo clínico Dr. Russell Thackeray , este es uno de los trucos de productividad más efectivos que puedes usar para hacer más: “Las personas que se cuidan a sí mismas tienen una mejor capacidad cognitiva. Tienen un mejor enfoque y una mejor concentración”. Suena como una muy buena excusa para salir un rato a caminar al parque.
10. Aplica la regla de los dos minutos
Si aparece una pequeña tarea que tardará dos minutos o menos en completarse, simplemente debes hacerlo. No lo pienses. No lo pospongas. Esa es la regla de los dos minutos en pocas palabras. Si es probable que la tarea tome más de dos minutos o no esté relacionada con lo que estás haciendo actualmente, agréguela a tu lista de tareas pendientes.
11. Establece límites saludables
A pesar de lo que los directores ejecutivos de Silicone Valley puedan hacerte creer, no necesita trabajar las 24 horas del día para tener éxito. De hecho, ya sea que estés calculando números en la oficina o realizando tareas en el hogar, es importante no dejar que la vida laboral consuma tu tiempo personal. Asegúrate de seguir una rutina y crea espacios separados para los dos.
Estos hábitos, además de darle un valor agregado a nuestro día, nos sirven de marco y acompañamiento en el desarrollo de la productividad integral que debe tener una vida balanceada entre el trabajo, estudios, ejercicio y bienestar personal.
La productividad no es una competencia de velocidad pero sí de resistencia, entre mayor cantidad de tiempo practiques estas técnicas, mayor cantidad de resultados le verás.
