CIUDAD DE MÉXICO / SemMéxico.- Contar con un Sistema Nacional de Cuidados impulsará la igualdad de oportunidades para toda la población y aumentaría en 10.3 por ciento la participación laboral de las mujeres en la economía nacional y permitiría atender oportunamente el proceso de envejecimiento poblacional, ya que para el año 2050 las necesidades de cuidados se duplicarán.
De cumplir el gobierno federal con establecer un Sistema Nacional de Cuidados se duplicarían las posibilidades para las mujeres de escasos recursos de salir de la pobreza, al pasar de un 37 a 68 por ciento de acuerdo con el reporte del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).
En la actualidad la tarea de cuidados en el hogar recae mayoritariamente en las mujeres representando esta economía el 27.4 por ciento del PIB, de lo anterior, el 89 por ciento es parte de la producción no remunerada de los hogares y, de esto, tres cuartas partes recaen en las mujeres.
Los trabajos remunerados en la economía del cuidado están feminizados y son precarios. Las trabajadoras del hogar, que representan 1 de cada 10 mujeres en la fuerza laboral femenina, conforman el estrato ocupacional más bajo de la economía nacional, el 98 por ciento de ellas carece de seguridad social y el 72.1 por ciento solo percibe hasta un salario mínimo. Todo esto reduce las oportunidades de elección de las mujeres y, en particular, su participación laboral, donde la brecha de género es de 33 puntos y limita la movilidad social.
Señala que los cuidados son todas las acciones destinadas a proteger, mantener, recuperar y promover las capacidades de las personas. Por su parte, el sistema de cuidados comprende un conjunto de acciones, públicas y privadas, así como normas y políticas, para asegurar progresivamente el derecho al cuidado de las personas.
Plantea que los objetivos de una política de cuidados es liberar el tiempo de las mujeres e incrementar sus oportunidades de elección; desarrollar las capacidades de quienes requieren y quienes proveen cuidados, y reducir el gasto de los hogares y aumentar sus ingresos disponibles.
Para lo cual proponen siete vertientes que deben impulsar los actores conocidos que son el Estado Mexicano en conjunto con el diamante de cuidados; mercado, sociedad civil y los hogares.
Contar con un marco legal y normativo del derecho al cuidado, en el que todas las personas somos sujetas de derecho.
Aumentar la disponibilidad de los servicios de cuidados e infraestructura en establecimientos.
Crear y fortalecer los servicios domiciliarios de cuidado para los grupos prioritarios. Además, facilitar el autocuidado, así como el derecho a la seguridad social y a contar con condiciones laborales dignas para las personas cuidadoras y trabajadoras del hogar remuneradas.
Impulsar la corresponsabilidad mediante medidas de cooperación entre los actores del diamante de los cuidados.
Adoptar medidas de financiamiento, gasto social y fiscal utilizando el enfoque basado en derechos humanos y de cuidados.
Desarrollar estrategias y mecanismos de consulta, socialización y divulgación permanente con todos los actores del diamante de cuidados, especialmente con la sociedad civil y las personas cuidadoras.
Generar información estadística, así como un sistema de monitoreo y evaluación, para profundizar en el estudio de la economía del cuidado e incorporar la información a las estrategias de desarrollo económico y social
AM.MX/fm