LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- En los años 80 y 90, emisora de radio musical que había, emisora que ponía éxitos como Like a Virgin, Material Girl, La isla bonita o Like a Prayer. Con canciones que iban desde las cosas más banales hasta reivindicaciones sobre la feminidad, Madonna se convirtió en la reina del Pop, título que, hasta la fecha, nadie ha podido arrebatarle.
De acuerdo con CINEMANÍA, sin embargo, todos los éxitos musicales que la cantante ha acumulado a lo largo de los años -con más de 300 premios, entre ellos 2 Globos de Oro, 20 MTV Video Music Awards y 39 Billboard- no se han traducido en un triunfo en su incursión en la industria cinematográfica.
Al contrario, la también actriz lleva años sufriendo las nominaciones de los Razzie, los premios a las peores películas y a los peores actores del año, que la han coronado como la peor actriz de la historia con el récord de más Razzie ganados.
A continuación, hacemos un repaso a su carrera como intérprete, su introducción en el mundo de la dirección cinematográfica y el intento de biopic que nunca fue.
Madonna, protagonista de películas
Dejando de lado sus cortometrajes centrados en los tours y conciertos que dio durante los 2000, la cantante ha aparecido en más de 20 películas, ya sea como ella misma en documentales como En la cama con Madonna (1991), Voy a contarte un secreto (2005) o I Am Because We Are (2008); como cameo musical en Loco por ti (1985) o Blue in the Face (1995); o como actriz de reparto.
Comenzó su andadura en el mundo del cine en 1985 con Un cierto sacrificio y Buscando a Susan desesperadamente, a las que les siguieron películas como Shanghai Surprise (1986) junto a Sean Penn o ¿Quién es esa chica? (1987). Estos dos últimos títulos ya le valieron dos premios a Peor actriz y, desde entonces, ha llegado a estar nominada hasta 15 veces, de las que ha ganado nueve galardones, entre ellos 5 a Peor actriz.
Aquello no la hundió y, después de 6 años y de rodar otros tantos largometrajes, entre los que destaca la película Sombras y niebla (1991) de Woody Allen, llegó El cuerpo del delito en 1993, en la que trabajó junto a actores como Willem Dafoe, Joe Mategna, Michael Forest y Anne Archer, y por la que volvió a convertirse en ganadora de los Razzie a Peor actriz.
Los últimos dos galardones los ganó en la época de los 2000, concretamente, el primero fue en el 2000 con Algo casi perfecto, una comedia dramática en la que la cantante daba vida a una profesora de yoga que quiere ser madre y que, tras una noche de borrachera, se queda embarazada de su mejor amigo gay. La película sufrió las nominaciones a Peor película, Peor dirección (John Schlesinger), Peor guion (Tom Ropelewski) y Peor reparto (Madonna, Rupert Everett y Benjamin Bratt).
El segundo fue tan solo dos años después, con el filme Barridos por la marea, comedia romántica dirigida por Guy Ritchie que también se llevó los premios a Peor película, Peor pareja en la pantalla (junto a Adriano Giannini), Peor remake o secuela y Peor director.
A partir de entonces, la actriz solo participó en 007: Otro día para morir (2003), la vigésima película de James Bond en la que realizó un cameo antes de pasarse al mundo de la producción como directora ejecutiva de las dos entregas de Superagente Cody Banks (2004) y al mundo del doblaje con Arthur y los Minimoys (2006). Tres años más tarde, ganó el premio a Peor actriz de la década en la 30ª edición de los Razzie.
Películas dirigidas por Madonna
Madonna tampoco ha tenido suerte como directora. Sus dos únicas películas, Obscenidades y sabiduría (2008) y Wallis y Eduardo: El romance del siglo (2011), tampoco se ganaron las alabanzas del público. En ellas, también trabajó como productora y guionista.
“Madonna y el cine nunca ha sido buena combinación”, dijo la crítica de Rolling Stone sobre el primero de los títulos, una comedia dramática musical basada en las propias experiencias de su directora. “Un relato irremediablemente blando”, seguía el texto, que le dio a la película un total de una estrella sobre cuatro.
En la segunda película cambió de registro para adentrarnos en la historia del Rey Eduardo VIII (James D’Arcy), quien renunció al trono para casarse con Wallis Simpson (Andrea Riseborough), una estadounidense divorciada. Entre el reparto encontramos también a Abbie Cornish, Natalie Dormer y Oscar Isaac.
La película ganó un Globo de oro a Mejor canción original y estuvo nominada a los Oscar a Mejor vestuario. Sin embargo, eso no fue suficiente para que la crítica le diese una buena puntuación.
AM.MX/fm