Ciudad de México.- Entre los muchos retratos de la treintena en la ficción, Dev Shah de Master of None muestra una faceta particular: la parálisis que surge cuando aparentemente no falta nada. A los 30 años, Dev disfruta de un trabajo cómodo como actor, un apartamento de lujo en Nueva York y la libertad de elegir. Sin embargo, esa abundancia se convierte en una trampa. Se encuentra en una “adolescencia tardía”, sin rumbo claro en su carrera ni en sus relaciones.
Su historia refleja un dilema generacional: el miedo a perderse algo (FOMO). En un mundo donde abundan las opciones, la búsqueda de lo mejor puede llevar a la inacción y a la insatisfacción. Para Dev, crecer implica dejar de intentar y atreverse a actuar, demostrando que incluso el privilegio puede convertirse en un obstáculo cuando socava el sentido de propósito.
Leslie Knope y el poder transformador de la pasión y el propósito
En contraste con la parálisis de Dev, Leslie Knope de Parks and Recreation encarna lo opuesto a la crisis de los 30. Lejos de rendirse ante la ansiedad existencial, Leslie vive con entusiasmo cada faceta de su vida. Funciona como una funcionaria pública entregada a su comunidad, apasionada por su trabajo y profundamente leal a sus amigos.
Su historia demuestra que el propósito y la pasión pueden ser fuentes inagotables de significado. Leslie enseña que la resiliencia ante los fracasos y la capacidad de poner el alma entera en lo que se persigue son los verdaderos cimientos de una vida plena. Además, redefine al “overachiever” no como alguien obsesivo, sino como alguien que encuentra satisfacción en el esfuerzo y en el servicio a los demás.
Thelma y Louise como símbolo de libertad y reinvención en la treintena
El viaje de Thelma y Louise en la película de 1991 muestra otra cara de la treintena: la rebelión frente a vidas monótonas y limitantes. Ambas mujeres, atrapadas en rutinas opresivas, deciden huir en una aventura que se transforma en un acto de liberación total. Aunque su final es trágico, su historia sigue siendo un poderoso manifiesto de autonomía y valentía.
La lección es clara: la treintena no tiene por qué ser la década del asentamiento obligado. Puede ser también un momento para romper moldes, desafiar expectativas y vivir aquello que no se pudo antes. Thelma y Louise validan el deseo de reinventarse radicalmente, incluso si ello implica arriesgarlo todo en nombre de la autenticidad y la libertad.
Un mapa narrativo que confirma la importancia del propósito y la conexión
El análisis de estos personajes amplía el mapa de la treintena como etapa vital. Dev Shah advierte sobre la inacción disfrazada de comodidad; Leslie Knope celebra la fuerza del propósito y el servicio; Thelma y Louise recuerdan que nunca es tarde para la reinvención.
En conjunto, se confirma que la madurez real se construye sobre la vulnerabilidad, la autenticidad y las relaciones significativas. Ficción tras ficción, el mensaje es constante: los 30 no son una crisis que temer, sino una oportunidad para redefinir la vida. Cine y televisión se convierten así en espejos culturales que ayudan a dar sentido a esta etapa, recordándonos que cada decisión, cada propósito y cada vínculo puede marcar la diferencia entre la parálisis y la plenitud.
EDT.MX/JC