CIUDAD DE MÉXICO.— Ismael El Mayo Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, emitió su primera declaración tras haber sido detenido en Estados Unidos, a través de su abogado, Frank Pérez. El capo mexicano reveló que “no me entregué, me secuestraron”, además de que ha habido “muchos informes inexactos” sobre este caso.
“En esta declaración proporcionaré los hechos verdaderos de lo que sucedió ese día. Deseo decir desde el principio que no me entregué y que no vine voluntariamente a Estados Unidos”, aseguró El Mayo Zambada, quien dijo que no tenía ningún acuerdo con los Gobiernos de México o Estados Unidos y, en su lugar, fue “secuestrado y traído por la fuerza y contra mi voluntad”.
“Joaquín Guzmán López me pidió que asistiera a una reunión para ayudar a resolver las diferencias entre los líderes políticos de nuestro estado. Estaba enterado de una disputa en curso entre Rubén Rocha Moya, gobernador de Sinaloa, y Héctor Melesio Cuen Ojeda, ex diputado federal, alcalde de Culiacán y rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa, sobre quién debería dirigir esa institución“, agregó.
Además de Héctor Cuen —asesinado el día de la detención del capo— y el gobernador Rocha Moya, El Mayo Zambada tenía conocimiento de que también estaría presente en la reunión Iván Guzmán Salazar, otro de los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán.
El Mayo Zambada iba a verse con el gobernador de @sinaloagobmx y con el asesinado Héctor Melesio Cuen cuando fue “emboscado”.
Lo que temía México: que el capo más importante de la historia revelara sus contactos en el Gobierno. pic.twitter.com/WqiU2PGkwg
— Antonio Nieto (@siete_letras) August 10, 2024
“El 25 de julio, fui al rancho y centro de eventos llamado Huertos del Pedregal, en las afueras de Culiacán, donde iba a tener lugar la reunión, que estaba programada para las 11:00 horas, y llegué un poco antes”. Ahí, dijo, vio a un gran número de hombres armados con uniformes militares verdes, y supuso que eran personal de Los Chapitos.
“Los dos que entraron conmigo eran José Rosario Heras López, comandante de la Policía Judicial del Estado de Sinaloa, y Rodolfo Chaidez, miembro de mi equipo de seguridad desde hacía mucho tiempo“, dijo El Mayo Zambada, quien afirmó que Guzmán López le pidió seguirlo y fue emboscado; “me ataron y esposaron”.
“Confiando en la naturaleza de la reunión y en las personas implicadas, le seguí sin dudarlo. Me condujeron a otra sala que estaba a oscuras”.
“En cuanto puse un pie dentro de aquella habitación, me tendieron una emboscada. Un grupo de hombres me asaltó, me tiró al suelo y me colocó una capucha de color oscuro en la cabeza. Me ataron y esposaron, y luego me obligaron a meterme en la caja de una camioneta”.
Para nadie es un secreto el nivel de colusión que hay entre los narcos y la clase política de Sinaloa. Pero lo declarado por el Mayo Zambada respecto al gobernador Rubén Rocha y Héctor Cuen evidencia una cohabitación preocupante, de confianza, que demuestra el nivel de… pic.twitter.com/P6cOsJ8kjO
— Víctor Hugo Michel (@vhmichel) August 10, 2024
Ismael Zambada comentó que fue sometido a maltrato físico y tiene lesiones importantes en la espalda, rodilla y las muñecas. Fue llevado a una pista de aterrizaje a 20 o 25 minutos de distancia, “donde me obligaron a subir a un avión privado”.
“Joaquín me quitó la capucha de la cabeza y me ató con bridas al asiento. En el avión no había nadie más que Joaquín, el piloto y yo. El vuelo duró entre 2.5 y 3 horas, sin escalas, hasta que llegamos a El Paso, Texas. Fue allí, en la pista, donde los agentes federales estadunidenses me detuvieron”.
El Mayo Zambada indicó que la idea de que se entregó o cooperó voluntariamente es “completa e inequívocamente falsa”. “Me trajeron a este país por la fuerza y bajo coacción, sin mi consentimiento y contra mi voluntad“, detalló el capo mexicano.
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EDT/dsc
