CIUDAD DE MÉXICO.— Pixar Animation Studios, productora de películas clásicas como Toy Story y Up, anunció que despedirá a unos 175 empleados, lo que representa cerca del 14 por ciento de su plantilla; esto, en una apuesta por recortar el contenido para streaming y enfocarse más en la proyección de largometrajes en cines.
“A lo largo del último año les he hablado en numerosas ocasiones de nuestro inminente abandono de la producción de series para Disney+, de la vuelta a centrarnos en los largometrajes y de la reducción de nuestro equipo que ello conllevaría. Ese día ha llegado“, informó el presidente de Pixar, Jim Morris, en un comunicado recogido por la prensa estadounidense.
En enero, el estudio de animación anunció que planeaba despedir al 20 por ciento de su plantilla, aunque finalmente la cifra será menor. Jim Morris prevé que al final de la jornada de este martes el estudio se haya puesto en contacto con todos los trabajadores afectados.
“Nos comprometemos a garantizar que su salida se gestione con el máximo respeto y cuidado en todo momento”, añadió el empresario.
Esta es la reestructuración más radical de la historia de Pixar -cofundada por el fallecido Steve Jobs y comprada por Disney en 2006- y responde al objetivo de centrarse en la calidad de sus producciones que se proyectarán en cines y alejarse de los contenidos en streaming, que hasta ahora una prioridad del estudio.
#HCHInternacionales | El estudio de animación despidió al 14% de su plantilla y sigue afrontando las consecuencias de las grandes pérdidas monetarias desde 2022.
▶ Desde enero, los empleados de Pixar habían estado esperando despidos, aunque los recortes fueron menores al 20%… pic.twitter.com/YvOyGrkx1u
— HCH Televisión Digital (@HCHTelevDigital) May 21, 2024
Las acciones de Disney han perdido casi la mitad de su valor desde marzo de 2021 y su dominio en taquilla se ha esfumado. El año pasado no lograron incluir ninguna de sus películas entre las tres con más recaudación por primera vez en muchos años, superados por Barbie, Oppenheimer y Super Mario Bros, un declive atribuido en parte a la pandemia de Covid-19.
La vuelta a las salas no ha sido como esperaban en Disney y ninguno de sus estrenos de animación ha logrado superar los 500 millones de dólares a nivel global desde 2019. La última en conseguirlo fue Toy Story 4, con mil 073 millones de dólares en todo el mundo en 2018, y antes de esa Increíbles 2 (mil 240 millones de dólares) y Coco, que rozó los 800 millones en ingresos.
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EDT/dsc
