OAXACA / SemMéxico.- Desde hace medio año, Paco acude a las sesiones que ofrece el Centro de Reeducación para Hombres que Ejercen Violencia Contra las Mujeres (Crehvm), adscrito a la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO).
“Llegué a este lugar, porque me obligaron, pues mi ex pareja y mis hijos me denunciaron ante un juez por ejercer violencia intrafamiliar”, reconoció.
“Después de 48 años de vida, no me cabía en la cabeza que tenía que erradicar mi forma de actuar, no únicamente con las mujeres, sino también con la familia, y hasta con las amistades; es lo que he venido aprendiendo en las terapias”.
El Crehvm se creó por decreto hace diez años, es la instancia encargada de brindar servicios reeducativos con perspectiva de género y derechos humanos a hombres que ejercen violencia contra las mujeres en Oaxaca. El precepto también contempla programas para hombres privados de la libertad y voluntarios.
“Se parte de la premisa que los hombres no son violentos por naturaleza o por una esencia que los hace violentos, sino han aprendido a ser violentos en una sociedad que les ha enseñado a ser hombres, valorando su masculinidad y su violencia como un valor positivo de honra, de reconocimiento y de autoestima”, comentó Anabel Morales Valeriano, titular de este Centro.
Expuso que el trabajo reeducativo se realiza de manera grupal con los hombres canalizados, buscando que inicien un proceso de identificación, detención y transformación de las violencias que ejercen contra las mujeres en su relación de pareja; “enfocándose especialmente en parar la violencia física, que pone en riesgo la vida de las mujeres”.
“Entonces, agregó, si partimos de que es producto de una educación machista y misógina, podemos pensar que eso puede cambiar y los hombres pueden aprender a relacionarse de manera no violenta”.
Incluso, la “reeducación de agresores» está contemplado en la ley general de acceso de las mujeres a una vida libre de violencia y en todas las leyes estatales es la materia, incluyendo la de Oaxaca.
De acuerdo con el testimonio de Paco, en un principio menospreció las sesiones, llegaba tarde o se retiraba temprano, pensaba que su asistencia era inútil, pero poco a poco “bajó la guardia” y descubrió actitudes que tenía que cambiar.
Posteriormente, al paso de las semanas, conforme iba escuchando el testimonio de otros usuarios, “parecía que me estaba viendo en un espejo, momentos similares le ocurrieron en la vida cotidiana”, dijo.
“Los Centro de Reeducación deben de proporcionar atención de manera especializada con personal calificado e infraestructura y con presupuesto de acuerdo al tamaño del problema”, opinó Eduardo Liendro Zingoni, antropólogo social,
fundador y ex director del Crehvm, en el periodo 2013-2016.
Consideró prioritario someter a estudio y consulta la posibilidad de presentar una iniciativa que le dé al Centro de Reeducación, “un marco legal específico como organismo público descentralizado con personalidad jurídica, patrimonio propio y autonomía técnica y de gestión”.
De acuerdo con el especialista en nuevas masculinidades en una década el Centro ha sido relegado, las oficina trabaja en condiciones de hacinamiento junto con otras dependencias de la Secretaría de Seguridad, tampoco cuenta con presupuesto operativo anual, asimismo el equipo humano se ha sido desmantelado y reducido.
“Además sigue pendiente la creación de los Centros regionales, tal como se establece en la ley desde el 1 de enero de 2022, al menos uno por región, de las ocho de Oaxaca ”,
concluyó Liendro Zingoni.
DATO
El año pasado fueron remitidos al Centro de Reeducación 154 hombres agresores (151 por vía judicial y 3 de manera administrativa). De los cuales, 144 fueron remitidos por violencia familiar, 5 por violencia sexual, 4 por lesiones y 1 por violencia feminicida, lo concluyeron 89 usuarios, terminaron las 52 sesiones, equivalente a un año.
El perfil de hombres que ejercen violencia es variado, aunque estacan los mayores de 35 años que trabajan en el sector del transporte, industria de la construcción, funcionarios, y campo.
AM.MX/fm