CIUDAD DE MÉXICO.- En Estados Unidos se publicó el dato del PIB para el tercer trimestre, donde se registró un crecimiento anual de 2.8%. El dato estuvo levemente por debajo de las expectativas de 2.9% y retrocedió respecto al dato del segundo trimestre, cuando la economía estadounidense alcanzó un crecimiento anualizado de 3.0%.
El gasto del consumidor, impulsado principalmente por un incremento en el consumo de bienes, fue el mayor contribuyente al crecimiento, seguido por el gasto público, impulsado por el gasto en defensa. Por el lado negativo, el principal detractor fue el déficit comercial, que explica en gran parte que el resultado estuviera por debajo de las estimaciones.
¿Cómo ha reaccionado el mercado?
El mercado de renta variable de EE. UU. ha reaccionado de forma mixta a la noticia. El S&P 500 registra una caída de 0.04%, el Nasdaq retrocedió 0.05% y el Dow Jones ha aumentado 0.07%. En el mercado de renta fija no se han observado grandes cambios: el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años ha incrementado un punto básico, ubicándose en 4.26%, mientras que el de dos años ha subido 5 puntos básicos y se encuentra en 4.16%. El dólar ha mostrado cierta debilidad, con el DXY retrocediendo 0.31%.
¿Cuál es nuestra visión?
A pesar de que el dato estuvo por debajo de las expectativas y retrocedió respecto al segundo trimestre del año, no consideramos que el PIB esté indicando debilidad económica.
A pesar de la normalización del mercado laboral, el consumidor estadounidense se encuentra en buen estado y fue el mayor contribuyente al crecimiento. Dado que el consumo se mantiene sólido, las compañías han conservado márgenes saludables, y no hemos visto un aumento significativo en la tasa de desempleo.
Esperamos que, con estas buenas dinámicas económicas, sumadas a una menor inflación y a los recortes por parte de la Fed, la economía estadounidense se mantenga en buen estado y logre evitar una recesión. Proyectamos que la Fed recorte 25 puntos básicos en cada una de las dos reuniones de 2024 para cerrar el año en 4.50%.
De esta forma, preferimos la renta variable sobre la renta fija y la caja. Dentro de la renta variable, favorecemos a EE. UU. sobre otras regiones. En renta fija, nos mantenemos neutrales en duración, dados los niveles actuales de las tasas y las buenas perspectivas económicas.
AM.MX/fm