DUBAI.— La actriz iraní Taraneh Alidoosti, encarcelada durante casi tres semanas por su apoyo a las protestas antigubernamentales en su país, salió de la prisión de Evin este miércoles por la tarde después de pagar una fianza, informaron medios locales.
⇒ Taraneh Alidoosti es la persona de más alto perfil en ser aprehendida por las autoridades en Irán desde que estallaron las manifestaciones por la muerte, en septiembre pasado, de Mahsa Amini, detenida por violar supuestamente el estricto código de vestimenta del país.
En las redes sociales se compartieron fotos no verificadas que mostraban a la estrella de la película ganadora del Oscar The Salesman, sosteniendo flores fuera de la prisión de Evin, al norte de Teherán, y siendo recibida por colegas y amigos. Esto fue confirmado por la abogada de la actriz, Zahara Minooee, a la agencia ISNA.
La actriz iraní Taraneh Alidoosti, encarcelada durante casi tres semanas por su apoyo al movimiento de protesta del país, fue puesta en libertad bajo fianza el miércoles, informaron medios locales #AFP pic.twitter.com/JMAlSvBLch
— Agence France-Presse (@AFPespanol) January 4, 2023
Taraneh Alidoosti fue arrestada en una redada policial en su casa el pasado 17 de diciembre después de que publicara una foto de sí misma descubierta en Instagram con un cartel con el popular eslogan de protesta “mujeres, vida, libertad”, con una leyenda que criticaba la ejecución de Mohsen Shekari, un manifestante de 23 años.
En su publicación, la actriz de 38 años dijo: “Su nombre era Mohsen Shekari. Todas las organizaciones internacionales que observan este derramamiento de sangre y no toman medidas, son una vergüenza para la humanidad”.
Mizan Online, la agencia de noticias oficial del Poder Judicial de línea dura de Irán, dijo en ese momento que la reconocida actriz fue detenida por publicar comentarios “sin citación”, así como por lanzar “material provocativo en apoyo de disturbios callejeros”.
https://twitter.com/SMohyeddin/status/1610694719662690323?s=20&t=Qc414BzjmDuSBm8BIRKwyQ
Las protestas, que fueron provocadas por la muerte de Mahsa Amini bajo custodia policial después de que fuera arrestada, se han convertido en el mayor desafío al sistema teocrático gobernante de Irán en décadas y han sido lideradas en gran parte por mujeres y jóvenes.
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