CDMX.- Las cantinas son lugares emblemáticos del país. El cine mexicano la inmortalizó a través de películas que van desde los clásicos de su época de oro hasta el género de ficheras y cintas contemporáneas. No obstante, estos enigmáticos lugares van más allá de su imagen estereotipada. Lejos de ser espacios sucios donde impera el pleito y el machismo (que, por supuesto, los había y seguro todavía los hay), hay cantinas donde se respira tradición, comodidad y buena convivencia.
Estos negocios ofrecen una gran variedad de licores, pero no sólo eso. También pueden encontrarse platillos típicos y botanas propias de la región. En nuestro país, por ejemplo, hay muchas cantinas donde puedes pedir deliciosos caldos o guisados. Incluso la fama de muchos de estos negocios se debe más a su tradición gastronómica, que puede consistir en una simple (pero suculenta) salsa con totopos hasta unas bien elaboradas flautas.
Aunque con el paso de los años, los negocios desaparecen o cambian de giro, felizmente, hay establecimientos que resisten como campeones. En México, hay cantinas que son auténticas joyas de la cultura popular. ¿Quieres conocer algunas de ellas? Acompáñanos por este tour a través de los estados miembros del Pacto Centro Occidente por el Turismo.
Querétaro
En este bello lugar puedes encontrar la cantina El Faro, una de las más antiguas de toda la región que, en sus inicios, fue también una tienda. Ubicada en el Centro Histórico de la ciudad, se distingue por el diseño de su fachada y sus clásicas puertas de cantina. Pero su punto fuerte es el menú: bebida y comida a precios bastante decentes.
Otro de los establecimientos que vale la pena conocer es La Casa Verde, uno de los más antiguos de la ciudad. Inaugurada en 1928 (¡ya casi un siglo!), esta cantina es célebre por su ambiente, su exhibición de fotografías históricas de la ciudad y sus sabrosos tacos Trejos de frijol y chorizo.
Si buscar algo más tradicional, el bar El Luchador para ti. Localizado al lado del Jardín de los Platitos, su decoración es el sello de la casa. En sus muros se halla una gran selección de imágenes que muestran la gloria de la lucha libre y del cine de oro mexicano. O qué tal la clásica La Selva Taurina, donde te encontrarás con una decoración típica, pero con un toque surrealista. El ejemplo más famoso es la icónica víbora del vitrolero, ornamento que lleva más de 70 años atrayendo la mirada de los visitantes.
Zacatecas
Si llegas a visitar este estado, definitivamente no puedes perderte de Las Quince Letras, cantina que desde hace 121 años ha ofrecido deliciosos tragos y ricas botanas a sus comensales. Enriquecido con una galería donde se alberga arte, documentos históricos de la ciudad y objetos antiguos, sin duda este lugar satisfará tu paladar y curiosidad.
Jalisco
Justo en el Centro Histórico de Guadalajara se halla la famosa cantina La Fuente, una de las más antiguas y tradicionales de la ciudad. Quienes la visitan, suelen tomarse alguna fotografía con su llamativa bicicleta, una pieza que lleva décadas arrumbada en un rincón del negocio, pero que se ha vuelto todo un hito. La leyenda cuenta que un hombre llegó, se emborrachó y, al darse cuenta de que no llevaba dinero, dejó su bicicleta en garantía de que volvería para saldar su deuda. Sin embargo, nunca regresó, y hoy en día, su prenda sigue en el lugar.
Si vas a La Fuente, sin duda disfrutarás de sentarte en la barra, una pieza cuya elaboración se remonta a la década de los 50. También puedes echarle un ojo a la caja registradora, hecha de plata y que aún conserva sus piezas originales.
En tu paso por Jalisco, también puedes ir por unas nalgas alegres. ¡No es lo que piensas! Se trata del trago más célebre de la Cantina Los Equipales. Esta bebida de nombre tan singular está hecha con vino tinto, refresco, ron y mucho hielo. Ideal para refrescarte mientras gozas de la comodidad del lugar, el cual está decorado con múltiples fotografías. Además, hay una rocola que, con su buena música, crea un ambiente bastante agradable.
Guanajuato
En el pueblo de Dolores Hidalgo podrás visitar El Incendio, una querida cantina fundada hace 102 años por el señor Hermenegildo Aguayo. Este establecimiento es uno de los más tradicionales del lugar y sin duda posee un tremendo valor histórico. ¿Sabías que era aquí donde venía el gran José Alfredo Jiménez? Cuentan las leyendas que fue en este negocio, acompañado de unos buenos tragos, donde compuso algunos de sus mejores temas.
Desconocemos qué bebía el maestro, pero tú podrás refrescarte con cerveza o un poco de tequila y mezcal de la mejor calidad. El lugar está ambientado con excelente música norteña y de mariachi, por lo que, si eres amante de estos géneros, seguramente te la pasarás muy bien. ¡Y no te quedes sin ver los recuerditos que el compositor mexicano dejó en El Incendio y que, actualmente, decoran la cantina!
San Luis Potosí
Si vas a turistear a la capital de este estado, no puedes omitir pasar un tato en El Escalón, una de las más longevas cantinas de la ciudad. Este emblemático lugar comenzó su historia en el mismísimo año de la Revolución: 1910. Desde entonces, ha ofrecido a los locales y fuereños un ambiente bohemio inigualable. Su trago más popular es el levantamuertos, una bebida de receta secreta que alivia la peor de las crudas. Tampoco puedes perderte de el Bar Tampico, localizado detrás de la Catedral Metropolitana. Este sitio ofrece una atmósfera tradicional y amena, además de una enorme variedad de botanas para acompañar tus bebidas.
Aguascalientes
Adivinaste: el Centro Histórico es el lugar clave. Si caminas por sus calles, te encontrarás con negocios de una excelente reputación, forjada a través de décadas. Por ejemplo, está Búfalos, un establecimiento con más de 80 años de actividad. En sus inicios, esta cantina fue conocida como La Última Copa, pues el local se ubicaba exactamente en el límite de la ciudad. Ahora, se le conoce como Búfalos debido a la enorme cabeza que decora su interior, precisamente, la de un búfalo africano. Vistoso y único.
Por último, cabe mencionar a la igualmente popular cantina Mi Cantón, que con 50 años de de antigüedad, se ha hecho de fieles clientes que, viernes tras viernes, abarrotan sus dos pisos. Si eres fumador, te alegrará saber que en la planta superior hay cubículos donde podrás echarte unos tabaquitos. El menú está conformado por platillos deliciosos y de maravilloso sabor casero. Puedes degustar un típico mole rojo, un plato de arroz o unos suculentos burritos de guisado. ¿Qué tal?
Si deseas saber más del programa Viaja en corto, visita el siguiente sitio. ¡No dejes de visitar las maravillas que resguardan los estados miembros del Pacto Centro Occidente por el Turismo!
Continúa leyendo:
Con información de EME Media
ED/SRH
